La exposición está montada bajo una estructura forrada de bambú que consta de 3 naves, una principal donde se exhibe una película de una hora de duración, y dos naves laterales, las cuales parecen un pasillo donde a lo largo del mismo hay dos series de fotos(una de cada lado) , y al final, la proyección de un cortometraje distinto en cada nave.
Siento que lo más atractivo fueron los videos pues las escenas eran hermosas, aunque a mi siempre me llaman más la atención los sonidos, y esa pista sonora que volvió "el complemento" ideal a las imágenes, esa música invade y estremece, te hace sentir cierta condición mística y feliz de estar ahí.
Algo que también sorprende mucho es que ninguna ilustración es resultado de algún proceso de montaje, es decir, son fotos completamente reales además de ser tomadas por separado de los videos.
Me compré una taza muy bonita con la foto que ven arriba, el sol se pone rudo, y la espera para entrar oscila los 50 minutos, y ya adentro puedes tardarte de 2 a 3 horas :D, claro si ves todo.
Pero lo mejor, lo mejor, lo mejor, es que con la luz y el tamaño de las fotos, podías crear una especie de mashup humano-cartel, donde con cierta perspectiva, mi acompañante pasaba a ser parte misma de la exposición o mejor dicho, de lo que quería ver :D
"pluma a fuego, fuego a sangre, sangre a hueso, hueso a tuétano, tuétano a ceniza, ceniza a nieve." ...
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